Después de unas horas planificando entrenamientos, ...nuevos retos e ilusiones...
Era hora de salir a correr unos minutos. Sólo ha sido una escasa media hora, pero hay que ver lo que da de si cuando empiezas a darle vueltas a la cabeza.
Hay quien dice que correr es muy aburrido y que lo odia, en cambio a mi me sirve para desconectar y entrar en "mi mundo". Una vez en este nivel de "sofronización", empiezo a vislumbrar soluciones y nuevos caminos a los problemas.
Así que ha sido una sesión de Running-Meditación, que ya la necesitaba, porque tengo que decir que ni la bici, ni la natación, ni los deportes colectivos que he practica nunca han llegado a darme lo que me ha dado el running, y ya son 16 años en esto.
Os puedo asegurar que muchas cosas han cambiado...zapatillas, pulsómetros, ropa técnica, organización de carreras, ...pero para mí sigue siendo lo mismo y aportandome lo mismo y eso es buena señal.